Desde la cuna del movimiento político y social más importante de la historia reciente de México, el aspirante a la Coordinación Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación, Adán Augusto López Hernández, expresó que los vientos del sureste soplan con fuerza.
Ante miles de seguidores y simpatizantes, el extitular de la Secretaría de Gobernación, Adán Augusto López, sostuvo que el obradorismo nació en Tabasco, con la esperanza de un país más justo, en el que nadie se quede atrás. “¡Nunca más un país sin nosotras y nosotros!”, enfatizó.
Desde Paraíso, donde se materializó la lucha por fortalecer la soberanía con la refinería Dos Bocas, López Hernández dijo que el pueblo tabasqueño no solo transformó su destino, sino que inspiró a toda la nación a construir un cambio verdadero.
Más tarde, en Huimanguillo, tierra de mujeres y hombres valientes, el político tabasqueño celebró su segunda asamblea popular de la jornada, donde añadió que la semilla del movimiento germinó y dio paso al primer gobierno democrático, referente de grandes luchas sociales por la justicia, la igualdad y la libertad.
En este contexto, López Hernández calificó como guerra sucia el freno a la distribución de los libros de texto en los estados de Coahuila, Aguascalientes y Chihuahua. Asimismo, despotricó contra el ministro de la Corte, José María Aguilar: “es el más burdo representante del conservadurismo, es un tinterillo de ocasión”, señaló.
Finalmente, celebró la construcción de más ferrocarriles, lo cual va a beneficiar al sureste; es en realidad la unión de todo México. Además, consideró el proyecto del transístmico como el proyecto del futuro del continente americano. “Yo diría, del mundo”, enfatizó.